Deja el pasado atrás, literalmente, déjalo atrás
No pienses en los errores del ayer, solo conserva en tu memoria las bellas victorias, las grandes enseñanzas, y mantén una lista en tu corazón de aquellas cosas que jamás debes de volver a hacer.
No caer en los mismos errores, pero tampoco tienes que estar recordando esos errores a cada momento y atormentándote con pensamientos negativos.
Se pierde mucho tiempo y energía haciendo eso, mejor, piensa y medita en las promesas de Dios.
Te recomiendo imprimas una de las imágenes que están en esta nota y las pegues en algunos lugares de tu casa, tu auto, tu trabajo y hasta en el baño para que tengas a donde mirar cuando te asaltan pensamientos de derrota.