Vi descender desde el cielo al Anticristo como una bola de fuego

2017-11-30

El testimonio del hermano Jason Mutumba tiene molestos a muchos creyentes... SIGUE LEYENDO.
Mutumba cuenta: “El pasado 22 de octubre de 2016 mi esposa soñó que se hallaba en una casa preparándose para una boda con otras personas. Ella salió de la casa y miró hacia arriba y vio una imagen que se formaba en el cielo.
Ella describió a la imagen como un ídolo, un dios “baal”. Esto le ocasionó pavor. Una vez que la imagen se formó por completo, sus ojos se pusieron colorados y empezó a salir fuego de estos hacia la tierra, como un rayo. Entonces, empezó a correr hacía la casa y les gritaba a todos que corriesen y entrasen a la casa, pues no estaban seguros afuera. Mas ciertas personas, a pesar de la urgencia, no creían que fuese verdad, aunque daba la sensación de que todos podían ver el incendio. 

En el instante en que entró a la casa y pacíficamente siguió preparándose para la boda. Entonces el lugar cambió y ya no estaban en la sala haciendo los preparativos, sino más bien en la boda”.

¿Qué dicen las Escrituras al respecto? ¿Cómo podemos interpretarlo?

Según Jason Mutumba, las Sagradas Escrituras compara a la Iglesia con una virgen que espera el regreso de su prometido, que es Cristo. A su regreso, la virgen se convierte en su novia. (Apocalipsis 19: 7-9). 

Este sueño, según Mutumba, refleja el ascenso del anticristo a la divinidad, representado por la imagen de un ídolo que se forma en el cielo. Las Sagradas Escrituras revela en 2 Tesalonicenses 2:3 al anticristo como un dios falso, llamándolo hijo de perdición. La palabra 'perdición' se traduce de la palabra griega “apoleia” que significa “destrucción”, que está relacionada con la palabra griega “Apolo”, ¡el nombre de un viejo dios heleno!

El fuego que desciende del cielo como un rayo representa la forma en la que Satanás fue expulsado del cielo en Apocalipsis 12. Entonces, le da su autoridad al anticristo (Apocalipsis 13: 2). Cristo vio a Satanás caer como un rayo (Lucas 10:18).

El fuego del cielo, asimismo, revela las acciones del falso profeta descrito en Apocalipsis 13: 11-15. Él es llamado la segunda bestia que se levanta de la tierra y también invoca el fuego del cielo. Él incita la creación de la imagen de la primera bestia (anticristo) y le da aliento a la imagen, a fin de que pueda hablar.

La casa señala o bien encarna el único sitio seguro, que se halla en Cristo. Me recordó el arca, el cual era el único sitio seguro para Noé y su familia, pues la inundación ocasionó la destrucción en toda la tierra. El nombre de Jesús en hebreo es “Yeshua”, que significa “seguridad” y “salvación”. Jesús es el Príncipe de la paz y en Él vivimos seguros sin importar un mínimo la turbulencia que nos circunda.

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Debemos prepararnos para el regreso de Cristo caminando en sumisión a la Palabra de Dios (Efesios 5: 22-27). ¿Estás advirtiendo a otros de las inminentes catástrofes que están a punto de caer sobre la tierra? ¿Estás preparándote para tu encuentro con el Señor viviendo en obediencia y cumpliendo Sus asignaciones? Mantengámonos ocupados en Sus cosas y también invitemos a otros a la cena de la boda del Cordero, predicando el evangelio. No todos van a tomar en serio estas advertencias y señales, pero debemos enfocarnos y hacer nuestra parte.

Si bien lo que dice Mutumba sobre lo que dice la Biblia es cierto, debemos recordar lo que dice el apóstol Pablo en Gálatas 1:8-9:

  “8 Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. 9 Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema”. 

En la Biblia se encuentra escrito todo lo referente a la salvación. El Señor, en su Palabra, dejó todo establecido.

“ 1  Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, 2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;3 el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas”, Hebreos 1: 1-3

Los sueños, sueños son. No sabemos si la esposa del pastor Mutumba cenó muy pesado esa noche y tuvo tamaña pesadilla.
Ciertamente, no tenemos que saber los planes de Dios, pues siempre son mejores que los nuestros. Tampoco tenemos que saber cuándo los ejecutará, pues Él siempre escoge el momento perfecto. Solo tenemos que seguirle, estar preparados para cuando llegue el momento y siempre hacer Su voluntad. Solo Él sabe el día y la hora.

Fuente: z3news.com