El “bebé milagro” falleció tres meses después de celebrar su segundo cumpleaños. Este niño sorprendió a todos por su extraña condición, pero será recordado por su maravillosa sonrisa.
“Perdimos a nuestro querido bebé”, anunció Jeremy Finch, padre del “bebé milagro”, a través de su muro en Facebook.
El 4 de marzo, Eli Thompson nació con una rara condición llamada Arhinia. Es decir, nació sin nariz.
Eli nació en el Hospital en South Baldwin en Foley, Alabama, pero fue trasladado de emergencia al Children's and Women's Hospital donde le practicaron una traqueotomía 5 días después.
“Él era muy brillante y feliz. Siempre sonriendo y saludando a todos”.
[Artículo relacionado: Conoce a la increíble Cassidy Hooper, la niña que nació sin ojo ni naríz]
Con sus dos añitos, Eli estaba aprendiendo lenguaje de señas y se encontraba bajo tratamiento fonoaudiológico para que pudiera aprender a hablar.
El funeral del “bebé milagro” se llevará a cabo en la Iglesia Fountain of Life Church en Saraland.
¿Qué es Arhinia?
Como te decíamos al principio, Arhinia es la ausencia congénita total de la nariz. Es una malformación que se da en casos muy raros y sucede cuando hay una alteración grave en el desarrollo del embrión. Es grave porque involucra el vital órgano del olfato y la entrada al sistema respiratorio. En casos más extremos esta malformación puede extenderse hacia órganos vecinos.
Según los especialistas, la cara y cráneo del bebé se forman a la 4ta y 5ta semana de gestación, y es precisamente durante esa etapa del embarazo donde puede ocurrir la Arhinia.
La cirugía necesaria para reparar esta condición es complicada. La familia de Elí tenía la esperanza de poder reconstruirle su nariz en algunos años. Pero la devastadora noticia publicada por su padre, puso fin a sus planes para el futuro.
[¡Milagro! Bebé regresa a la vida]
Miles y miles de usuarios manifestaron su apoyo y dieron sus condolencias, uniéndose al dolor que ahora embarga la familia de Eli.
Paz a sus restos, que Dios les dé fortaleza a sus familiares.
No dejes de LEER: ¿PUEDE UNA MADRE SOBREVIVIR AL SUICIDIO DE UN HIJO?