Ejercicios para el alma

La piedad requiere disciplina formación

La piedad requiere disciplina formación, entrenamiento…

Uno se disciplina para la santidad. Pablo usó la palabra griega gymnadzo (de la cual obtenemos la palabra gimnasio). El atleta y el cristiano dedicado, deben someterse a una auto-disciplina y entrenamiento intensivo.

La formación exige tiempo, atención, esfuerzo y dedicación, a fin de experimentar el progreso. Los atletas luchan porque buscan el premio terrenal: el honor.

El cristiano busca la intimidad con Dios. 1 Corintios 9:25-27, 2 Timoteo 2:3-6

Hacer todo lo posible para vivir en paz con todos y lleguemos a ser santos (espirituales): sin santidad nadie verá al Señor. Hebreos 12:14 NVI

Dios nos llama al arrepentimiento del pecado

Dios nos llama al arrepentimiento del pecado y, de la confianza en Cristo para salvarnos de la ira de Dios (Romanos 10:9-10, 13). Dios pone un nuevo corazón en cada creyente, por lo tanto, el deseo y la capacidad de perseguir la santidad está presente (Filipenses 2:12-13). Sin embargo, debemos capacitarnos para crecer en santidad.
Las disciplinas espirituales pueden ayudarle a moverse en una dirección hacia Dios este año:

1) Nutrirse de la Biblia (escuchar, leer, estudiar, memorizar, meditar). Mateo 4:4, Salmo 119

2) La oración y la meditación a solas. Marcos 1:35, Mateo 6:9-13. Ora a través de la oración del Señor (ACTS).

3) Adoración (privada y pública). La adoración puede ser definida como: hablar y responder a Dios desde nuestro corazón basados en conceptos correctos acerca de Dios (Juan 4:24); atribuir el valor adecuado para Dios a través de la alabanza, el servicio u obediencia amorosa: alabarlo por todo lo que El es. Apocalipsis 5:12, 13

Conclusión

Conclusión: Comience con algo pequeño y sea consistente en la práctica de disciplinas espirituales. ¿Cómo se come un elefante? ¡Una mordida a la vez! ¿Cómo crecer en la piedad? Un día a la vez, una opción a la vez.

Reto de este nuevo año: Si usted no tiene un plan en la actualidad, comprométase a 15-30 minutos a nutrirse diariamente de la Biblia, la oración y el tiempo a solas con Dios. ¡No se dé por vencido. Después de todo usted le pertenece a Dios por toda la eternidad!

Matthew Henry escribió esta resolución en su diario el 1 de enero de 1705:

"No renuncio, sino que repito y ratifico todos los convenios que anteriormente he hecho con Dios. Y, lamentando que no he vivido apegado completamente a ellos. Determino solemnemente en el comienzo de este nuevo año, hacer una entrega fresca de mí: de todo mi ser, cuerpo, alma y espíritu; a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo; mi Creador, Redentor y Santificador. Y, no prometiendo o haciendo un pacto de mis propias fuerzas, porque yo soy muy débil, pero en la fuerza de la gracia de Jesucristo, así prometo que me esforzaré para este año estar completo en toda la voluntad de Dios.

Sé que esto es la voluntad de Dios: mi santificación. Señor concede que este año puede ser más santo y caminar más cerca que nunca en santidad. Yo sinceramente deseo ser llenado con tus pensamientos santos. Que haga yo todo con santas intenciones; determinado por designios santos y ser dirigido por ti, Señor, en todas mis palabras y las acciones por tus principios sagrados.

¡Oh, Dios! Que el hilo de oro de la santidad corra y se entrelace en la tela de mi ser en este año".

¡Así que a trabajar! Disciplínate con el propósito de la piedad y recuerda 1 Timoteo 4:8 - "La disciplina/ejercicio corporal es solo poco beneficio, pero la piedad es provechosa para todo, pues tiene promesa para la vida presente y también para la vida futura".

Lecturas recomendadas:
La práctica de la piedad, Jerry Bridges
Disciplinas espirituales para la vida cristiana, Donald S. Whitney
La Santidad de Dios, R.C. Sproul

Cómo estar en forma espiritualmente

Ejercítate: Cómo estar en forma espiritualmente (1 Timoteo 4:7-8)

1. La piedad requiere desearla: "... Uno se disciplina para lograr la piedad". Para crecer en la piedad, primero tenemos que querer tenerla. El apóstol Pablo instruyó al joven Timoteo para que pusiera el deseo de ser una persona espiritual: su meta principal. Y, esta debería ser también la nuestra.

Pero la piedad es en realidad un medio de gran ganancia cuando va acompañada de contentamiento (humildad). 1 Timoteo 6:6

Sin embargo, huye de estas cosas… ¡Hombre de Dios! Y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la perseverancia y la mansedumbre. 1 Timoteo 6:11

Cómo orar a Dios con fe?

La fe nos ayuda a confiar en que Dios escucha y responde a nuestras plegarias. Read next feature >