Un estudio emergente de ADN de ciertos fósiles humanos ha permitido descubrir, no sólo que los ancestros de los primeros europeos lograron sobrevivir a la fase final de la era del hielo, sino la existencia de una población humana que más tarde dejaría de existir. Tal descubrimiento tuvo lugar a partir del análisis del código genético del cráneo de un hombre europeo (Kostenki 14) que vivió hace 36.000 años en el oeste de Rusia. LEER MÁS, CLIC AQUÍ
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