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[…] Al darse cuenta de esta delicada situación, Michael tomó un objeto contundente y no dudó en romper el vidrio de la ventanilla del vehículo para poder liberar al perro que se encontraba siendo víctima de un calor abrazador en el interior del carro. De esta manera, el hombre evito con su acto heroico un desenlace fatal para la pequeña mascota que corría serio peligro, al no tener salida de su agónica situación.
Sin embargo, este acto heroico no fue del agrado de la dueña del vehículo y del perrito que estaba siendo sofocado por el calor, ya que al momento de regresar a su carro y notar que el vidrio de la ventanilla estaba completamente destruido, denuncio a Michael con unos oficiales de seguridad que se encontraban en la zona para que lo arrestaran.
Los oficiales no querían detener al hombre que había salvado la vida del perrito, pero ante la insistencia de la mujer y la declaración de Michael, quien no negó haber roto el vidrio para liberar a la pequeña mascota, los policías no tuvieron más remedio que arrestarlo. Pero de todas maneras, el sujeto no se arrepiente de lo que hizo, porque para él un vidrio se puede reemplazar, pero la vida del perrito no.
