2017-10-05

Escobedo, Coahuila, México - una anciana de alrededor de 75 años de edad, se abrazó al cadáver de su esposo durante 3 días. El caso se descubrió Ayer por la tarde cuando los vecinos sintieron el mal olor.

María Rocha y Ricardo de León Salazar vivían en una humilde morada ubicada en la esquina de la calle Francisco I. Madero, del municipio de Escobedo. La pareja no tuvo hijos y se dedicaba a la crianza de chivas. Sin embargo, debido a su avanzada edad se vieron obligados a vivir de las comidas que le proporcionaba el DIF municipal. 

Los vecinos cuentan que la última vez que vieron al matrimonio fue el domingo, cuando ambos estaban sentados cerca del corral de las chivas. Esa fue la última vez que lo vieron juntos. 

Cerca del mediodía de ayer, los vecinos fueron alertados por los fétidos olores que emanaba la vivienda. Al entrar al domicilio encontraron a Doña María recostada del cadáver de su esposo, quién ya estaba en avanzado estado de descomposición. 

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La mujer trató de impedir que el personal de Servicios Periciales de la Procuraduría se llevarán el cadáver de su marido, alegando que aún estaba vivo. A pesar del olor nauseabundo y la presencia de gusanos en la cama y el piso. 

Doña María cuenta que el domingo pasado su "viejo" se cayó repentinamente en el cuarto y ella, como pudo, lo subió a la cama, donde permaneció hasta que fue encontrado este miércoles. 
Todo indica que Don Ricardo sufrió un infarto el domingo, pero Doña María, quien padece de trastornos mentales, no advirtió su muerte y continuó con su vida ignorando que Ricardo ya estaba muerto.

Doña María no convive con sus vecinos, y debido a su avanzada edad, la anciana permaneció sin comer, encerrada en su humilde vivienda. Lamentablemente, las lluvias impidieron que la comida del DIF Llegará al lugar. 

"Se encontraba muy débil, casi se desvanecía porque tenía desde el domingo que no ingería alimentos. Su esposo era quién la atendía, pero al morir, ella permaneció a su lado, ignorando que estaba muerto", explica su cuñada. 

Los gastos funerarios fueron cubiertos por el Alcalde de Escobedo a través del DIF. María permanecerá hospedada en una vivienda del Ejido Sombrerete, pero temen que ella se escape y regrese a su hogar, donde seguramente continuará buscando a su marido.

 

 

 

 
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